SILVIA OTERO Y JORGE RAMOS
EL UNIVERSAL
SÁBADO 06 DE MARZO DE 2010
POLITICA@ELUNIVERSAL.COM.MX
Human Rights Watch (HRW) criticó la resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) que limita las atribuciones de los titulares de la Comisión Nacional de Derechos Humanos y de los organismos estatales.
José Miguel Vivanco, presidente para las Américas de la organización, dijo que “es una oportunidad perdida” para fortalecer la protección de los derechos humanos en la práctica, y que el Estado mexicano “no puede escudarse” en si un derecho garantizado a nivel internacional aparece o no en la Constitución Política del país para que sea protegido.
La decisión de los ministros, comentó, contrasta con la reforma constitucional en materia de amparo aprobada por el Senado a fines del año pasado que, en la práctica, implica que los derechos humanos reconocidos en los tratados serían exigibles ante los tribunales.
Dijo que “después de todo, mantener estas leyes vigentes significa una violación de las obligaciones internacionales del gobierno de México, del cual la Suprema Corte es parte”.
Al respecto, Raúl Plascencia, presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), dijo que le “parece que es una limitación, más bien para la sociedad en general a efecto de que puedan hacer valer los derechos que reconocen los tratados internacionales. Quizás hubiera sido más adecuado un punto de vista más amplio, menos restrictivo y con una visión internacional en materia de Derechos Humanos”.
Lamentablemente no prosperó la idea de cuatro ministros de la SCJN que iba en sentido contrario al de la mayoría, agregó Plascencia.
La decisión de la Suprema Corte no es definitiva y en tal sentido el titular de la CNDH anticipó que expondrán elementos jurídicos para otra ocasión, ante este precedente.
Piden acelerar reformas
Luego de presentar su informe de actividades del año 2009, el ombudsman nacional pidió al Senado acelerar una reforma constitucional que tiene “atorada” en sus comisiones.
“Será muy importante que el Poder Legislativo pueda ahora sí meter el acelerador un poco más a fondo y aprobar esta reforma que está pendiente para evitar situaciones de esas características y sobre todo un mayor peligro a la sociedad mexicana para que tenga que enfrentar leyes que sean contrarias a los derechos humanos”.
“Hubiera sido más conveniente adoptar un criterio menos restrictivo (...) buscando fortalecer y hacer efectivos los instrumentos que en la materia ha suscrito nuestro país, y por lo menos, hasta el día de hoy todavía están ahí, como letra muerta”.
—¿Cómo cuáles?
—Son 102 instrumentos internacionales que van desde los derechos de la mujer, la niñez, los discapacitados, indígenas, migrantes, el acceso a la justicia, obligatorios que, con este precedente, me parece que se limita a la sociedad mexicana en la vigencia y defensa efectiva de sus derechos humanos, contestó.
“La reforma pendiente en el Senado protegería a los ciudadanos mexicanos con base en los tratados internacionales que son ley suprema y si hay una ley secundaria que es contraria o limita derechos se tiene que optar por los compromisos internacionales”.
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