El Universal
HERMOSILLO. En medio de manifestaciones de estudiantes de la Universidad de Sonora, el Congreso local autorizó al gobierno del estado —una de las entidades más endeudadas del país— la contratación de un crédito de hasta 600 millones de pesos para “rescatar” a los concesionarios del transporte urbano.
Con un voto en contra de una diputada perredista, los legisladores de la 59 legislatura aprobaron el decreto que autoriza al Fondo Estatal Para la Modernización del Transporte a que contrate con la banca comercial este crédito con el objeto de destinarlo exclusivamente a brindar apoyo financiero a los concesionarios que enfrentan necesidades extraordinarias.
De acuerdo al dictamen presentado, el Gobierno del estado explica en su justificación que la acumulación de incumplimientos de pago por parte de los concesionarios a sus arrendadores financieros ocasionó que el mes pasado fueran demandados por la vía judicial al acumular adeudos por 416 millones 957 mil 470 pesos.
Al seguir presentándose esta situación, establece el dictamen, “y al no encontrar los concesionarios liquidez para renegociar estos pasivos, se verá amenazada la prestación del servicio y en consecuencia habría una grave afectación a los usuarios”. Estos 600 millones de pesos se sumarían a la deuda actual del estado que fue reestructurada el 30 de noviembre del año pasado. Ese día la 59 legislatura aprobó una operación de endeudamiento hasta por 8 mil 500 millones de pesos.
Esto con la finalidad de reestructurar la mayoría de los créditos que constituían la deuda pública del estado, que hasta esa fecha era un de total de 9 mil 332 millones de pesos.
También durante la sesión de ayer, los 33 diputados aprobaron diversas modificaciones a la Ley del Transporte a fin de que sea el Gobierno de Sonora quien establezca los ajustes a las tarifas, ya que actualmente esta atribución la tiene el Congreso local.
Con estos asuntos desahogados en los 15 minutos que duró la sesión, se pone fin a una problemática que se agudizó los primeros meses de este 2011 con una serie de manifestaciones y paros en el servicio por parte de los 400 concesionarios de Hermosillo que demandaban un aumento a la tarifa.
Sin embargo, la decisión tomada entre Gobierno del Estado y legisladores no fue del agrado del movimiento estudiantil “Nosotros, los otros”, un grupo de alumnos de la Universidad de Sonora que se opusieron con pancartas al subsidio autorizado.
Cristián René Navarro, líder de los estudiantes, aseguró que este subsidio es una agresión a la economía familiar, ya que aunque no se autorizó un aumento a la tarifa —como pedían los transportistas— se les dará un recurso que se pagará con dinero de los sonorenses. “No se han hecho estudios técnicos... Además es injusto que le den dinero a empresas que no prestan un servicio de calidad”, destacó la joven.
José Luis Moreno, presidente de la Sociedad Integradora y Concentradora del Transporte Urbano en Hermosillo, dijo que el acuerdo logrado es justo, ya que su situación es crítica al no darse desde 2006 un aumento a la tarifa de 5 pesos en Hermosillo, y de 4 y 2 pesos en otros municipios.
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