Los cuerpos desnudos y decapitados de cuatro hombres fueron arrojados a una plaza de Nuevo Laredo, una ciudad mexicana cercana a Estados Unidos, según informó el sábado la policía.
Los sicarios actuaron el viernes por al noche a la vista de los transeúntes que paseaban por una de las avenidas más concurridas de esa localidad de 350.000 habitantes.
Al lado de los cuerpos y las cabezas colocaron una gran manta, con un mensaje presuntamente firmado por el Cártel del Golfo y dirigido a sus enemigos.
Las decapitaciones son frecuentes en la violenta lucha entre los carteles de la droga mexicanos que luchan por el control de las rutas de la droga a Estados Unidos.
Más de 34.000 personas han muerto en México en actos de violencia relacionados con el narcotráfico en los últimos cuatro años.
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