La seguridad social de México adjudicó una guardería al "cártel" de Sinaloa

La Fiscalía de México (Procuraduría General de la República) abrió una investigación para determinar el motivo por el cual una guardería infantil gestionada por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS, seguridad social) fue adjudicada a una hija de un poderoso del narcotráfico. Se trata, según ha difundido el periódico El Universal, de la estancia "Niño Feliz S.C." ubicada desde noviembre de 2001 en Culiacán, capital del estado de Sinaloa, considerado la cuna de varios "cárteles".

En el acta constitutiva para obtener la adjudicación por parte del IMSS aparece como dueña María Teresa Zambada Leyva, identificada desde entonces como la hija de Ismael "El Mayo" Zambada, jefe del violento "cártel" de Sinaloa. El contrato fue renovado hace dos años y en él la socia principal volvía a ser María Zambada Leyva.

El 17 de mayo pasado, el Gobierno de EEUU, a través del Departamento del Tesoro, hizo pública la "Red Financiera de Ismael Zambada García". Doce personas formaban parte de la lista, entre ellos María Zambada Leyva y, entre los negocios para lavar dinero, figuraba la guardería.

Según datos oficiales, la guardería "Niño Feliz S.C." atiende a 209 menores y por cada uno de ellos recibe 2.249 pesos mensuales (118 euros). En total, el gobierno mexicano estaría pagando 5.640.000 pesos (295,855 euros).

En una entrevista concedida a una emisora de radio, el director del IMSS, Daniel Karam, dijo que las autoridades judiciales están investigando el caso de "Niño Feliz S.C.". Destacó que en caso de que la PGR encuentre algún motivo para clausurar el centro, "seremos los primeros en llevar a cabo esa acción". Su responsabilidad, explicó, es revisar que esas guarderías cumplan con las normas de seguridad y calidad.

México vive un escándalo por la publicación de las listas con los nombres de los dueños de las guarderías adjudicadas por el IMSS a particulares de los 32 estados y el Distrito Federal. En ella aparecen nombres de políticos y sus familiares, además de empresarios poderosos. Y es que el 5 de junio pasado en la norteña ciudad de Hermosillo, 48 menores murieron por el incendio en una de estas estancias infantiles. El centro no contaba con las mínimas medidas de seguridad.

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