Es mentira que la influenza porcina (o humana o del tipo A o como se llame) mate a las personas. Lo que las está matando es la pobreza, la falta de atención, el descuido, la insalubridad, la desnutrición, el pésimo sector salud mexicano.
Y ahora, para colmo, con toda la histeria desatada por el gobierno, la que se va a morir es la economía mexicana, totalmente paralizada. Ya estaba muy gravemente herido nuestro sistema económico, y con lo que ha pasado podemos darlo por fallecido.
Si la gripe se cura, el mal que está sufriendo la economía podría ser necesariamente mortal. Me pregunto si se actuó con seriedad al decretar la paralización de casi todas las actividades, en especial las turísticas.
El retroceso que todo esto significa no podrá ser remediado en décadas. Por lo tanto, habrá más pobreza, más desnutrición, peores sistemas de salud. Y en la próxima epidemia, la que sea, habrá más mexicanos muertos.
Y así seguirá ese círculo vicioso, que solo vamos a romper cuando llevemos al poder a un gobierno realmente comprometido con la gente.
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